Catedral de Santiago, 1965

La pintura representa una gran catedral, que se eleva sobre una multitud de personas que caminan hacia ella. El uso de acuarelas crea un efecto etéreo y de ensueño, con los colores mezclándose para crear una atmósfera serena.

Catedral de Santiago
C. 1965. Acuarela y lápiz sobre papel de 33 x 25 cm. Coleccion Centro Leon. Fondo: Familia Leon Cabral.

En esta escena la mayoría de los colores utilizados por Morel en la acuarela son tonos de azul, creando un efecto de calma y tranquilidad. Los reflejos amarillos agregan un toque de color, creando un contraste con los tonos azules.

Las personas se representan en movimiento, creando una sensación de movimiento y energía. Están caminando hacia la catedral con determinación, como atraídos por su belleza y majestuosidad.

El cielo está pintado en tonos de azul y gris, creando un efecto brumoso y etéreo. Los colores se mezclan a la perfección, creando una sensación de profundidad y distancia.