Paisaje con dos ranchos y hombre en caballo, c. 1954

El sol estaba alto sobre los vastos campos abiertos, arrojando un cálido resplandor dorado sobre el paisaje. El campesino a caballo cabalgó pacíficamente a través de los campos, con su fiel caballo debajo de él. La brisa era cálida y llena de aromas a tierra y hojas.

Paisaje sin titulo
C. 1954. Óleo sobre lienzo, 16 x 24 pulg. Colección: Centro de Arte Ceballos Estrella.

A lo largo del camino, dos pequeñas chozas con sus estructuras de madera viejas y gastadas, pero lo suficientemente resistentes como para resistir el paso del tiempo.

Más allá de las chozas, las majestuosas montañas azules se elevan para tocar el cielo azul. Las montañas parecían extenderse infinitamente, creando un impresionante telón de fondo para la escena.

El cielo era de un impresionante tono azul, salpicado de mullidas nubes blancas que se deslizaban perezosamente por el horizonte. Los rayos del sol se filtraban a través de las nubes, creando patrones de luces y sombras en el suelo.

La belleza serena de la escena lo abarcaba todo, llenando al campesino con una sensación de asombro y aprecio por el mundo natural que lo rodeaba.

Campesino y paisaje, cuento inspirado en esta obra de Yoryi Morel