Colección de Críticas de las obras de Yoryi Morel

La obra pictórica de Yoryi Morel se destaca por la limpidez y precisión de sus pinceladas, que atrapan al vuelo un instante de la realidad, inmortalizándolo en el paisaje del Cibao que aparece en sus lienzos impregnado de las luces y los olores propios del campo. La técnica es comparable a la de ciertos pintores impresionistas europeos, pero los temas son otros y no hay duda de que los impresionistas franceses hubieran envidiado la luz desbordada y las sombras iluminadas de la campiña nuestra, que cobra vida y se hace trascendente en los mejores lienzos de Morel.
— Fernando Ureña Rib (1951-2013), Artista y critico de arte

La preeminencia del símbolo y de la libertad absoluta de la creación, tuvo su impulso inicial en el Impresionismo, la sistematización que hace Yoryi de los principios impresionistas lo coloca en el país como un perfecto moderno. Yoryi inicia la pintura moderna y netamente nacional en el país, a él le tocó desanudar los siglos de la tradición romántica, realista, costumbrista y fundar nueva vertiente partiendo esencialmente de los preceptos impresionistas.
— Jose Enrique Garcia, Hoy Digital, 2006

Decir que Yoryi no ha tenido maestros, que ha realizado todos sus cuadros sin haber visto antes ni un solo cuadro de ningún otro pintor, decir que es la primera vez que sale de su rincón natal de Santiago, no es buscarle excusas ni aprobaciones complacientes, es, simplemente, afirmar la existencia del genio
— Tomás Hernández Franco, via Memoria de la Pintura Dominicana

La vocación pictórica de Jorge Octavio nació en ese mundo imaginario que crean los niños alrededor suyo. Mundo de monólogos, de inventiva, de fantasías, de construcciones, de escondite y de refugios que él solía revivir.
— Danilo de los Santos, Memoria de la Pintura Dominicana, 2008

Este muchacho de veinte y cuatro años, pequeño, delgado, elegante y discreto, tiene un alma exquisitamente sensible y sabe traducirla en las maravillosas tonalidades de su paleta...
— Juan Bautista Lamarche, Listin Diario, 1930

Sólo el Sol de Santiago ha enseñado a pintar a Yoryi Morel...
— Juan José Llovet, 1936, via Memoria de la Pintura Dominicana

Yoryi Morel ha venido de nuevo a maravillarnos con su carga de sol y atmósfera, de vida y ambiente cibaeños. Ha venido de nuevo a poner otro paréntesis en nuestra ansia de arte auténtico, apenas consolada con el indirecto medio de los fotograbados en libros y revistas. / Esta vez ha traído muchos nuevos cuadros que acusan un notable progreso en su conciencia de artista y en su técnica pictórica...
— Pedro Troncoso Sánchez, 1936, via Memoria de la Pintura Dominicana
Apreciar la obra pictórica de este célebre y reconocido maestro de las artesnacionales es adentrarse en un mundo donde la dominicanidad anida en cada rincóny calle, en el paisaje y la fiesta popular, en la gente, en fin, en el cotidiano, la memoriay las tradiciones de un pueblo. La luz tropical ha quedado inmortalizada en las telas de Yoryi Morel. Muy bien loenalteció Tomas Hernández Franco en 1932, con motivo de la primera Exposición Individualdel pintor, con estas palabras: “Podemos decirlo ya: existe el trópico para el Arte, existe yael artista que entiende el trópico y existe el pintor del trópico. Yoryi ha hecho su revelación”. Por los caminos de nuestra expresión es una magnifica selección de paisa-jes, retratos, bodegones y naturalezas muertas, que estamos seguros estimulará a di-rigir una mirada múltiple al universo “yoryiano”. El Museo Bellapart pone a disposicióneste conjunto de obras célebres de Yoryi Morel, para enriquecer la identidad de los dominicanos y establecer un diálogo fecundo con el público, la crítica especializada,los aficionados y las generaciones artísticas emergentes.
— Juan José Bellapart, 2006

A pesar de ser un autodidacta , el titulo de “Creador de una pintura auténticamente dominicana” se ajusta perfectamente al nombre de Yoryi Morel . Aunque a los inicios de su carrera recibió algunas orientaciones del Maestro Juan Bautista Gomez, después , a la manera de un Van Gogh tropical , decide no sujetarse a ningún academicismo, eligiendo libremente el sendero pictórico que más se ajusta a su temperamento, libre de ataduras y de prejuicios sociales. Como ser humano y como artista Yoryi fue un hombre que se adelantó a su época, ejerciendo la más absoluta libertad en ambas facetas de su existencia. No obstante a su carácter bohemio fue un incansable trabajador del arte y muchas de sus obras marcan un hito dentro de una vertiente de la pintura nacional, que es la que podria calificarse de Dominicanista , y cuyo máximo exponente, como dijimos antes, fue el propio Yoryi Morel.

A pesar de los exuberantes paisajes coronados por floridos flamboyanes que encendían de color y de luz la visión de los que se sumergían en el éxtasis de la contemplación de sus cuadros, a pesar de las escenas campesinas , con sus fiestas pletóricas de alegría , en las que músicos y danzantes armonizan sus expresiones en una simbiosis que entre otras cosas , sirve para demostrar el dominio de Yoryi Morel, en cuanto al uso del color y las formas. A pesar de lo anteriormente expresado , este Maestro Santiagués, fue un magnifico retratista , como lo atestigua el magistral lienzo al óleo que pintó, con el rostro del gran humanista Pedro Henriquez Ureña.

En 1952 , Yoryi Morel obtuvo, en la VI Bienal de Arte de Santo Domingo, el Primer Premio de Pintura.

Lo panorámico en sus paisajes se convierte en una sutil metáfora poética en donde el aire es transparente, los cielos son azules y las aguas de los rios fluyen; todo envuelto en una atmósfera bucólica que tiende a llevar paz interior al contemplador de sus obras.

Nadie en todo el espectro de la plástica Dominicana ha tenido un dominio tan perfecto del uso de la luz en los trabajos pictóricos . En fin todos los elementos confluyen técnicamente y en forma intuitiva en los cuadros de Yoryi Morel , para hacer de cada uno de sus trabajos , una obra maestra.

— Fernando Ureña Rib (1951 – 2013), artista, Crítico de arte.

El trabajo y las faenas del campo se ven representados con la imagen del campesino cibaeño, la mujer encarnada en la marchante y la lavandera. Por otra parte, el paisaje es uno de los elementos esenciales de la obra artística de Yoryi Morel.

Dentro de la composición paisajística, tenemos las flores y marinas, fácilmente apreciables en la obra de Jorge Octavio Morel Tavares (Yoryi).

Sus paisajes y bodegones se ven marcados por pinceladas cortas, acentuando las luces y las sombras con una gama cromática que tiende a los colores pasteles y brillantes. Jorge Octavio Morel Tavares (Yoryi), nacido en Santiago, en 1906, empieza su obra con el dibujo de su primer estudio ubicado en su casa y le tituló “La dicha”, sin saber en aquel entonces que para 1932, presentaría su primera exposición individual en el Club Nosotras en Santo Domingo. En 1933, Yoryi Morel estableció la Academia Yoryi en Santiago, la cual se especializó en artes visuales.

En 1939, participó en una exposición internacional en San Francisco, California, obteniendo la medalla de bronce. La pintura exhibida en esa ocasión fue “En el mercado” realizada en el año 1938, adquirida por la International Business Machines (IBM), de Nueva York.

El artista se dedicó por largos años a la labor pedagógica en el Cibao y en Santo Domingo. Sus obras han recorrido ciudades tanto de América como de Europa.

— Jatnna Massiel Concepción, Periodista.